HASTA SIEMPRE, COMANDANTE-PRESIDENTE…
Como me gustaría manejar con
excelencia el arte de la escritura para, sin pretensiones y mucha sencillez
poder organizar y expresar todas las ideas y sentimientos que me embargan, que
nos embargan a tu pueblo incluso allende nuestra frontera, por tu lamentable
pérdida física Comandante-Presidente. Te nos fuiste Comandante-Invicto, dejándonos
un gran vacío y un gran sentimiento de dolor, de angustia, de profunda soledad
y tristeza en nuestros corazones … Aquellos que te lloraron o te lloran aún,
las lágrimas han podido aliviar, mitigar un poco su dolor, pero los que no
hemos podido llorarte, se nos ha encogido el corazón, se nos hizo un nudo en la
garganta y seguiremos llevando ese luto, está muy pesada carga de desolada, desesperación
y dolor, hasta el fin de nuestros días.
Hasta para morir fuiste
sabio, si fuiste tú quien escogió el cómo, el donde y el cuándo, porque quizás
ya era hora de descansar y dejarle a tu querido pueblo en que te convertiste,
tu preciado legado, por aquello de que ahora que no está papá para que no los
haga, estamos todos obligados a hacer, lo que tú querías y nos pedías día tras
día. Pero te fuiste muy temprano Chávez…debiste cumplir tu sueño de descansar
en un chinchorro en tu amado llano, tu patria chica. Yo creí que había sido tu DIOS quien te invitó
a ir con Él…
Es lamentable que hombres
como tú, como decía Neruda, vengan cada cien años cuando despiertan los pueblos…
porque ahora que estamos despiertos gracias a tí, te echamos de menos y
continuaremos haciéndolo… Ya extrañamos las instruidas guías de tus “Aló Presidente”,
tu gran amor que le inyectaste con humildad y sabiduría a tu querido pueblo
porque todos somos tú. Tu autentico gran amor por la Patria, tu bondad, tu
carisma, tú como padre, tú como hijo, tú como hermano, tú como amigo, tu
permanente buen humor cuando era necesario, tus canciones, tus acertadas y
sabias decisiones. Los chistes, las anécdotas, los cuentos del arañero que es
la historia de tu vida… que es la historia contemporánea de la lucha liberadora
e independentista de nuestro pueblo; que habían empezado nuestros originarios
con Guacaipuro y Tamanaco a la cabeza y nuestro primer Libertador Simón Bolívar,
porque ahora tú eres nuestro segundo Libertador. Tus largas y educativas
conversas sobre nuestra lucha de independencia, y pasajes de nuestra, para muchos,
casi desconocida y convenientemente enterrada historia…hasta los oscuros
momentos del golpe de Estado, cuando en binomio pueblo y-Fuerza Armada Nacional
Bolivariana, los que tuvieron la oportunidad, sobre todo aquí en la capital,
con sus bebes en brazos, con la razón en la cabeza y su inmenso amor en el
corazón como únicas armas, salieron dispuestos a ofrendar lo más sagrado para
ellos, sus hijos y sus vidas; por la vida de su Comandante-Presidente y por el
regreso al cargo que este tu pueblo, te había otorgado y que tú siempre supiste
honrar..
En lo personal tuve la suerte de estrechar tu mano en el aeropuerto de Santa Elena de Uairén y entregarte un pliego de necesidades de la comunidad en que vivía. A la semana me llegó un telegrama diciendo que habías ordenado las repuestas a las mismas. ¡Así eras tú! ¡Eso era revolución! ¡Que no se cumplió, no fue tu culpa!
Intente
hacerte llegar algunos escritos hechos por mí tratando de ser el revolucionario
que tú exigías en nosotros, donde criticaba y critico algunos errores de nuestro proceso que aún persisten y nos hacen
mucho daño. Durante casi diez años estuve tratando de obtener una audiencia
contigo, no me consta que hayas recibido las solicitudes, porque de ser así me
hubieses recibido o hecho recibir por alguien en la imposibilidad de hacerlo tú,
aunque estoy seguro que hubiese sido lo primero. Mi sueño era tomarnos un
cafecito y conversar, como pueblo estaba seguro que si me oías, de repente
decía algo que te podía interesar.
Sabe
Comandante-Presidente, que tenemos una Fuerza Armada Nacional Bolivariana que ahora
vemos por qué te sentías tan orgulloso de ella. Hoy día lo estarías mucho más
al ver cómo junto con tu pueblo que te ama forman el fuerte, estrecho y
armónico binomio “cívico-militar” por el que tanto luchaste y tanto deseabas.
Hubieses oído al Almirante en Jefe Diego Molero Bellavia, decir con voz
quebrada pero con absoluta firmeza, convicción y serenidad que el pueblo y la
Fuerza Armada Nacional Bolivariana éramos uno y que haríamos cumplir el legado
que el Comandante en Jefe nos había dejado. Puedes estar tranquilo porque en
esto tampoco, “araste en el mar”, y vamos a cumplir cabalmente con el legado
que nos dejaste; de tener Patria Bolivariana, Revolucionaria, Independiente,
Socialista y Chavista, para felicidad de nuestros hijos y los
hijos de nuestros hijos. Y para aquellos de tu equipo que no cumplan con este
mandato el binomio se los demandará. Porque ahora tú eres nosotros y nosotros
somos tú, y si es necesario, los obligaremos a cumplir con tu legado que es el
nuestro.
De
tus enemigos, que son los míos, que son los nuestros, es lamentable que no
hayan tenido la suficiente gallardía para reconocer al Hombre Humanista, al
Gigante Hombre que fuiste con ellos, que si algún pecado tuviste fue el de ser
demasiado humanista, pero si ellos no son capaces de querer a su patria, a sus
familias… no podíamos esperar que nos quieran a nosotros, mucho menos a ti, que
nos mostraste, nuevamente, el camino para tener la Patria, que siempre sabremos
defender y nunca más perderemos.
Otra
victoria que no pudiste ver, fue que venciste a los medios internacionales
fascistas de información. Se cayó el velo y el mundo pudo ver la realidad de
como tu pueblo venezolano, el pueblo Latinoamericano, Central, Caribeño y de
otras latitudes del mundo, no solo te lloraron y lloran tu partida
física, sino que hasta vinieron a rendirte honores. No te imaginas cuanto amor
y esperanza sembraste en los pobres, los sin voces, los invisibles, los
desposeídos, los esclavizados por el mundo capitalista. Y “amor con amor se
paga” como tu solías decir. Ellas y ellos numerosas, numerosos vinieron a darte
el saludo póstumo con el alma y el corazón rasgado por el dolor pero henchidos
de muchísimo amor. Eres un Hombre, un Gigante, un Guerrero muy amado por tu
gran pueblo del mundo.
Por
último querido Camarada Comandante-Presidente, escogiste acertadamente como
despedida de tus pueblos del mundo la consigna del “Guerrillero Heroico”
Ernesto Che Guevara “Hasta La Victoria Siempre” y no es casualidad, es
causalidad porque es un compromiso que tus hijos e hijas de la patria grande
honraremos. ¡La Victoria Siempre Será Nuestra!
También
debo decirte que nuestro querido Comandante Fidel Castro; tu maestro, tu amigo,
en su nombre y en el del heroico hermano pueblo cubano, por el profundo y
desgarrador dolor de tu partida, dijo estas sencillas pero muy significativas y
sentidas palabras: “!Hemos perdido nuestro mejor amigo!”.
¡Chávez
vive!
¡La
lucha sigue!
¡Todos somos Chávez!
Ya recorren el mundo advirtiéndole al
imperialismo y sus lacayos que la victoria final de los pueblos oprimidos en
lucha,está cada día más cerca.
¡Hasta La Victoria Siempre!
Comandante-Presidente
Hugo Rafael Chávez Frías
¡Viviremos, Cumpliremos y Venceremos!
¡Tu inmenso pueblo que te ama!